COLUMNA LIBRE
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Gobierno
criminal y represor
[ Opinión de la Redacción ]
Lo acontecido la noche del martes nos llena de coraje y miedo.
¡Pobres maestros!, dicen más allá de
los límites de Guerrero. México y el mundo entero se solidarizan con ellos.
¡Pinche gobierno de mierda!, publican usuarios en redes más allá de nuestras
fronteras.
La noche del martes 24 de de febrero nuestros
valientes maestros dieron muestra de lo que son capaces.
Son efectivos nuestros docentes en el
arte del engaño mediante el uso de propaganda negra a través de las redes
sociales, plataformas que han utilizado para victimizarse.
Sumaron simpatías difundiendo rostros
cubiertos de sangre, de maestros sometidos y tirados al piso, incluso de varios
rijosos apilados como cuches en la parte trasera de las patrullas.
Salpicaron de sangre Twitter y Facebook
para hacerle creer a la gente que han sido víctimas del gobierno criminal y represor. Y provocaron lo que en la clandestinidad desea algún personaje perverso: movilizar y generar repudio.
En todas sus acciones de violencia
escalada han actuado igual. Provocan para victimizarse y mienten con el recurso
inquisitivo de “desalojo violento” y “represión gubernamental”.
Los maestros de Guerrero han tomado como
bandera la memoria de los 43 normalistas desaparecidos. Los muertos son sus
rehenes de chantaje y negociación.
La noche del 24 de febrero los
cetegistas utilizaron una camioneta y un autobús para arrollar a los policías federales
que conformaron un cuerpo humano para impedirles que tomaran el aeropuerto de
Acapulco, tras bloquear 10 horas el Boulevard de las Naciones.
El hecho desató la reacción natural de supervivencia en los
uniformados que tuvieron que defenderse de hombres cubiertos del rostro y armados con tubos, palos, piedras y machetes.
Algo similar pasó el 14 de diciembre
del año anterior en Chilpancingo, cuando uno de los desquiciados maestros
arrolló a varios policías y periodistas con una camioneta.
Como siempre, niegan todo e
inmediatamente atascan las redes con “su verdad” para atraer simpatías.
Y para mantener vivo su movimiento les urgía un muerto propio. Ya lo tienen.
Y para mantener vivo su movimiento les urgía un muerto propio. Ya lo tienen.
A los cetegistas no les importan los
familiares dolidos ni la educación de nuestros hijos, queda de manifiesto.
Han
utilizado como carne de cañón a los dolidos familiares de los normalistas y han
obligado a padres de familia de escuelas primarias a participar como apoyo en
sus movilizaciones para conseguir sus propios intereses, como el otorgamiento
de plazas y reconocimiento oficial de las que les concedieron irregularmente.
La falta del pago de sus salarios no devengados ha sido otra excusa formidable que les llegó con el 2015.
La situación actual es tensa. Ya tienen
los maestros un mártir. Se trata del maestro Claudio Castillo Peña quien
falleció horas después del zafarrancho en el hospital naval, tras ser aplastado
por las llantas de un vehículo que le quebró las costillas, más no por los toletazos que le propinaron en su cabeza los policías, como se apresuraron a decirnos en las redes sociales.
Desde los primeros minutos, los
maestros utilizaron la muerte del maestro jubilado como un trofeo al cual
venerar con cánticos de guerra. Ahí está la evidencia en las redes sociales,
ahí está la propaganda tóxica que han difundido para ocultar sus verdaderos
intereses.
Los videos que se han divulgado y que aparecieron horas después de los
acontecimientos ocurridos el martes por la noche, les han quitado la careta de
gente buena a los maestros, y su reacción ha sido intolerante, a grado de
injuriar a los internautas que los cuestionan en lugar de echarles porras a sus publicaciones.
◄Mira el Video►
Transforman
conflicto en violencia
Los maestros han confundido la fuerza con
violencia ante el conflicto, al grado que sus acciones tienen como objetivo
dañar a terceras personas antes que solucionar los diferendos mediante el diálogo.
La violencia
surge por una deformación, una exageración de nuestra capacidad de reacción y de
las capacidades vitales por superar las dificultades.
La violencia
es la forma más burda y primitiva de agresión en donde prima la destrucción
sobre cualquier otra alternativa para solucionar nuestras diferencias.
Queda claro
que los maestros guerrerenses tienen una visión negativa del conflicto, pues
ven la violencia como necesaria y hasta la justifican para hacer respetar sus
posiciones.
Es condenable el
desalojo violentó y condenable el trato del gobierno federal a los maestros de
Guerrero, pero condenable también es la provocación que significa ocultar
información a las bases para tensar el conflicto y que este derive en actos
vandálicos.
Pero más allá de sus demandas
personales, atrás de los maestros hay un grupo subversivo que responde a
intereses políticos para manipularnos a todos, maestros y ciudadanos comunes,
para generar el caos con golpes certeros que rompen con la convivencia social y
ahogan la economía, afectando la actividad turística y comercial.
¿Quién mueve a
los cetegistas? ¿Qué interés hay detrás del engaño a los maestros?
Antes de concluir la presente entrega, los redactores hemos de confesar que, al ver las fotografías de los maestros detenidos la noche del 24 de febrero, se nos erizó la piel y nos invadió el terror nomás de pensar que éstos sujetos son maestros de nuestros hijos... ¡Y de los hijos tuyos también!
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