A la familia de un homosexual se le estigmatiza, y es cuando el gay o la persona lesbiana entra en un mecanismo de defensa y recurre al enojo o a la confrontación, cuando se trata de una preferencia normal con la cual se nace y se muere, expresó el psicólogo Cristóbal Galarza de la Paz
ACAPULCO (www.libertadguerrero.net).- Los altos índices de suicidios en los jóvenes, pero sobre todo en personas de preferencias sexuales diferentes, como son los gay y lesbianas, se deben básicamente al rechazo y a la incomprensión de los propios padres de familia, quienes no están preparados para afrontar las críticas y señalamientos del resto de la sociedad, la cual se tiene que reeducar para respetar a los demás como son.
Lo anterior fue expresado por el psicólogo y terapeuta Cristóbal Galarza de la Paz, quien se ha dedicado a estudiar este fenómeno social, más cuando de por sí hay un trauma casi natural con el paso de la adolescencia y la pubertad, donde cualquiera se pregunta ¿Quién soy? ¿Adónde voy? Siento extraño mi cuerpo, etc.
En la misma sociedad, en muchas ocasiones, a la familia de un homosexual se le estigmatiza, y es cuando el gay o la persona lesbiana entra en un mecanismo de defensa y recurre al enojo o a la confrontación, cuando se trata de una preferencia normal con la cual se nace y se muere, sin embargo, ante la falta de cultura de los padres y de la misma sociedad, se crean conflictos.
En la actualidad, precisó el especialista, se requiere que la familia se reeduque y sensibilice; se rescaten los valores, ya que en la calle sigue manteniéndose la marginación hacia los gay, las lesbianas, los travestis, transexuales y toga una gama de condiciones inherentes a personas con preferencias sexuales distintas a los heterosexuales.
Galarza de la Paz urgió para que se abran espacios en los gobiernos en beneficio de la comunidad lésbico-gay y se escuchen propuestas al respecto, peor propuestas apegadas al estado, no solo las apegadas a las leyes interamericanas de los derechos humanos, cuyos acuerdos y tratados en los estados del país son rechazados y hasta pisoteados
Sin embargo, reconoció que el principal “muro” que tiene la comunidad lésbico-gay, son ellos mismos, que fallan sobre todo como seres humanos.
Para concluir, dijo que es muy necesario que haya más apertura social hacia la comunidad, donde no haya tintes ni banderas políticas.
Por Staff de Redacción
Octubre/24/2014
www.libertadguerrero.net
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