REPORTE ESPECIAL (www.libertadguerrero.net).- La neurociencia y la espiritualidad hasta hace pocas décadas transitaban caminos separados, pero en lo últimos diez años resultan sorprendentes los hallazgos de los estudios que utilizan la meditación para observar el funcionamiento del cerebro. Estas pruebas han permitido descubrir que las estructuras cerebrales reconocen y procesan, además de las emociones, los pensamientos, dejando al descubierto el poder que tenemos los seres humanos de reeducar nuestra mente.
Los experimentos del prestigioso neurocientífico de la Universidad de Wisconsin, Richard Davidson, develan el poder curativo que ejerce la meditación sobre el cuerpo físico y emocional. Meditar, de acuerdo Davidson, moviliza los centros cerebrales que activan las emociones positivas ejerciendo mayor control sobre las negativas.
Hoy, sabemos que el pensamiento provoca un cambio físico en la corteza motora del cerebro, esto es lo que se conoce como neuroplasticidad, es decir que el cerebro es flexible, moldeable, tiene la capacidad de adaptarse a nuestras decisiones.
Igualmente, la línea de investigación del Dr. J. David Creswell de la Universidad de California, UCLA, se enfoca en cómo la mente y el cerebro impactan la salud física y el rendimiento de las personas. Las pesquisas de Creswell concluyen que la meditación es beneficiosa para el tratamiento de diversidad de dolencias y hasta modifica el perfil bioquímico de los pacientes.
Argumenta el neurocientífico que “sus áreas de trabajo tienen como objetivo explorar los mecanismos psicológicos subyacentes por los cuales la gente puede hacer frente de forma adaptativa a la adversidad y prosperar en actividades de la vida”.
Aun cuando estos estudios no están asociados con enfoques religiosos o espirituales, es significativo que hayan utilizado como técnicas de meditación las contenidas en el Budismo. Y es que esta milenaria enseñanza con más de dos mil quinientos años de antigüedad, sin basamento científico, contiene la sabiduría del universo entero.
Cuando combinamos la meditación con nuestra práctica espiritual, contactamos lo más óptimo de nuestro ser y provocamos una transformación profunda en nuestra actitud ante la vida.
El Budismo de Nichiren Daishonin que practico, postula que todos los seres humanos somos únicos, que poseemos en nuestro interior una fuente inagotable de sabiduría, que activamos y manifestamos cuando entonamos continuamente Nam Miojo Rengue Kio.
Esta meditación activa nos permite manifestar nuestra verdadera entidad que es la Budeidad, la más elevada condición de vida del ser humano, transformar de raíz las causas de nuestra negatividad, ser empáticos, responsabilizarnos de nuestros actos, relacionarnos positivamente teniendo en cuenta que somos más valiosos de lo que creemos y que estamos aquí para cumplir una misión personalísima, ser genuinamente felices y contribuir a que los demás también lo sean.
Por Luisa Chesneau-Pichardo
Febrero/01/2014
www.libertadguerrero.net
___________________________________________________
0 comments :
Publicar un comentario
Por favor, ingresa tu correo electrónico para poder contactarte posteriormente... Gracias por visitarnos.