Devocional del pastor Rick Warren
“Amémonos los unos a los otros, porque el amor viene
de Dios”. 1 Juan 4:7 (NVI)
Si quieres saber cómo ser un buen padre y construir
una familia fuerte, no tienes que buscar en internet o en una biblioteca. No busques
más allá del mejor libro escrito sobre paternidad: La palabra de Dios, la
Biblia.
La Biblia dice en 1 Juan 4:7 “amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios” (NVI).
Más que cualquier otra cosa, los niños necesitan
amor consistente e incondicional. Necesitan un lugar donde pueden ser aceptados
–con todo y errores.
¿Qué es compasión? Compasión es la combinación de
amor y comprensión. La compasión es donde sabes todo sobre alguien y aun así te
agrada esa persona.
El amor no es natural. Tienes que aprender a amar.
Aprendes practicando. ¿Qué mejor lugar para practicar que con las personas con
quienes compartes tu vida? Si puedes aprender a amar a tu familia, puedes amar
a cualquier persona. ¿Por qué? Porque es fácil amar a las personas a la
distancia; lo difícil es amar a quienes convives a diario. Cuando practiques
amor en la familia, estás aprendiendo a amar de verdad.
Muchas veces amamos a nuestros hijos, pero no lo
expresamos de una manera que ellos puedan entenderlo. Los niños entienden el
amor de tres maneras: afecto, afirmación y atención.
1. Afecto.
Los niños necesitan muchos abrazos, contacto y besos. Ellos necesitan sentir tu
amor.
2. Afirmación. Necesitas decirle a tus hijos todos
los días —y más de una vez al día— cuánto los amas. Afírmalos, y edifícalos en
amor.
3. Atención. Uno de los mayores regalos que puedes
dar a tus hijos es escucharlos con atención. Cuando miras a un niño a su nivel,
a sus ojos, estás diciendo, “Tú me importas. Tú eres importante para mí. Quiero
escuchar lo que tienes que decir”. Al hacer esto, le muestras compasión.
Reflexiona
sobre esto:
¿En qué formas necesitas que tus hijos vean y
reciban amor?
¿Qué rutinas o hábitos puedes practicar para que
puedas mostrar a tus hijos afecto, afirmación y atención cada día?
Si no tienes hijos, ¿cuál es tu responsabilidad con
los niños en tu vida, como los sobrinos, vecinos o hijos de tus amigos?
Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo,
¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión
de creer en Jesucristo y seguirlo; haz la siguiente oración:
Querido Dios:
Me asombra que quieras ser mi amigo y que hayas enviado a tu Hijo Jesús para hacer posible una relación contigo. Confieso que he pecado y te pido perdón. Creo que Jesús murió para quitar mis pecados y que lo resucitaste. Quiero confiar en Jesús como mi Salvador y seguirlo como mi Señor desde hoy en adelante. Dios, quiero conocerte más y más y vivir mi vida siguiendo tus propósitos para mí.
En el nombre de Jesús hago esta oración. Amén.
La Biblia dice: “porque «todo el que
invoque el nombre del Señor será salvo»” (Romanos 10:13 NVI). ¿Invocaste el
nombre del Señor? Entonces eres salvo. ¡Bienvenido a la familia de Dios!
¡Comparte este devocional con tus amigos y familiares!
"¿Y cómo van a creer en él, si no
han oído hablar de él? ¿Y cómo van a oír, si no hay quien les anuncie el
mensaje?" Romanos 10:14 (DHH)
Te invitamos a conocer el ministerio de Esperanza Diaria del Pastor Rick
Warren



0 comments :
Publicar un comentario
Por favor, ingresa tu correo electrónico para poder contactarte posteriormente... Gracias por visitarnos.