Por Staff de Redacci贸n
ACAPULCO, GRO., (21/Mayo/2024).- Una mujer, cuya identidad se mantiene en reserva por seguridad, denunci贸 una serie de abusos y maltratos sufridos tanto ella como su esposo, un militar en servicio activo; en el 56 Batall贸n de Infanter铆a del Ej茅rcito Mexicano.
A trav茅s de un mensaje an贸nimo a Libertad Guerrero Noticias, la v铆ctima acus贸 al coronel Josu茅 Barr贸n Sevilla, comandante del batall贸n, de mantener a los soldados y sus familias en condiciones cercanas a la esclavitud desde su llegada a Acapulco.
Seg煤n la afectada, su esposo ha estado sometido a jornadas laborales extenuantes, lo que ha impactado gravemente la vida familiar y la salud de su hijo, diagnosticado con Trastorno por D茅ficit de Atenci贸n e Hiperactividad (TDAH) y crisis frontales.
"Desde que el coronel Barr贸n lleg贸, mi esposo no ha podido ayudarme con nuestro hijo ni asistir a mis consultas m茅dicas durante mi embarazo. Sufr铆 un accidente automovil铆stico por la lluvia, y embarazada, no pude recibir atenci贸n m茅dica adecuada porque mi esposo no pudo acompa帽arme", relat贸 la mujer.
En medio de la desesperaci贸n, dijo que intent贸 abortar, resultando en una experiencia traum谩tica en el hospital local donde, de acuerdo con su testimonio, fue maltratada por el ginec贸logo de turno.
La situaci贸n se agrav贸 con el paso del hurac谩n, cuando su hogar qued贸 inhabitable.
"Nos dieron alojamiento en el 谩rea de sanidad, pero dorm铆amos en una camilla, mi hijo y yo, soportando el calor y las picaduras de insectos. En una ocasi贸n, un generador de luz que pod铆a habernos ayudado fue retirado por orden del Coronel Barr贸n, quien afirm贸 que 'solo 茅l ten铆a poder' en el batall贸n", se帽al贸.
Adem谩s, la denunciante mencion贸 acoso sexual por parte de un general del estado nayor, quien la presion贸 para obtener su n煤mero telef贸nico y la acos贸 f铆sicamente. Al no ceder a sus avances, fue testigo de c贸mo el asistente del General la observaba mientras se ba帽aba, aumentando su sensaci贸n de vulnerabilidad y miedo.
A pesar de sus esfuerzos por buscar justicia, al presentar su caso ante las autoridades militares, la mujer fue recibida con burla y desd茅n.
"Despu茅s de esperar dos horas para hablar con un general en la regi贸n, s贸lo me atendi贸 un coronel, amigo del Coronel Barr贸n, que se ri贸 de m铆 mientras contaba mi historia", lament贸.
La v铆ctima hizo un llamado urgente a otros militares y sus familias a alzar la voz contra estas injusticias.
"Estamos mal de salud y desesperados. Hay mucha gente en el ej茅rcito en mi situaci贸n. Por favor, hablen, no se queden callados", convoc贸.
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