El infierno tiene devastados, literalmente, a los australianos que han visto como sus casas y entorno han sido devorados por el inclemente fuego

Fuente: Agencias
SIDNEY, 03 de enero de 2020.- Habitantes del Estado Victoria y la costa sur de
Nueva Gales, esperan la forma más rápida de escapar con ayuda de otros humanos.
La fauna queda atrapada porque no hay forma de ayudar a todas las especies,
cuando la prioridad son las personas.
En
la ciudad turística costera de Mallacoota, las 4000 personas que quedaron
encerradas en la playa pudieron ser salvadas ilesas en camiones de bomberos.
Sin embargo, la ciudad podría permanecer aislada durante semanas a raíz de las
llamas, por lo que las autoridades lanzaron víveres y enviaron un barco cargado
con comida para dos semanas.
En
Malua Bay los incendios forestales se extendieron hasta el precipicio de los
acantilados, donde más de 1000 personas quedaron atrapadas en la playa,
rodeadas por un anillo de fuego. "Todos estaban en la playa, cubiertos de
cenizas y humo", contó Al Baxter, un exjugador de los wallabies, la
selección australiana de rugby, según publicó el diario The Guardian.

Especies
enteras de plantas y animales han sido arrasadas. Medios locales como News, han
informado la cifra: casi 500 millones, muertos por el fuego abrasador, desde
que comenzó a arder todo.
Los
ecologistas de la Universidad de Sydney estiman que 480 millones de mamíferos,
aves y reptiles se han perdido desde septiembre pasado.
8.000
koalas, de los 28.000 en el país, forman parte de las víctimas. También han
muerto canguros, wombats y demonios de Tasmania.
Se
teme que la cifra aumente sustancialmente, debido a que los incendios no ceden
ante el trabajo de voluntarios de bomberos.
Un
comunicador australiano advertía a finales del 2019, parte de la gravedad de lo
ocurrido.
¿La
gente se da cuenta que tan mal está Australia en este momento? Un área del tamaño
de Bélgica se ha quemado y más de medio millón de animales han sido arrasados”,
escribía Deric O’hartagáin en su cuenta de Twitter.
Evacuación
de humanos: la prioridad
Los
medios australianos están en emergencia, al unísono con las zonas arrasadas por
las llamas.
Casi
6 millones de hectáreas se han perdido en los últimos días. Cerca de una
veintena de personas ha muerto debido a los incendios que se han ido
extendiendo por Victoria y Nueva Gales del Sur, donde los turistas debieron
evacuar en las últimas horas, como el resto de los habitantes de esta zona.
Los
botes han sido la vía de escape. El mar ha brindado el salvoconducto para huir
del fuego. Un elemento por otro. El infierno tiene devastados, literalmente, a
los australianos que han visto como sus casas y entorno han sido devorados por
el inclemente fuego.
En
Nueva Gales del Sur ya se habla de la mayor evacuación en la historia de
Australia. Miles de vehículos salían desde ayer para poder escapar del fuego.
El llamado era para que los residentes cercanos al Parque Nacional Kosciuszko,
abandonaran todo. El plazo era hasta las 10:00 am de este viernes, según medios
como The Courier Mail.
Los
autos fueron escoltados por los servicios de emergencia en la autopista Princes
Hwy, en dirección norte, entre Milton y Nowra.
Cumplir
con el plazo otorgado para evacuar se volvía toda una pesadilla. El tráfico
pesado hizo que el proceso tomara entre 6 a 7 horas en completarse.

Australianos
furiosos con primer ministro
El
primer ministro Scott Morrison visitó recientemente una zona afectada en Nueva
Gales del Sur, pero los residentes le reclamaron por la respuesta del gobierno
en la emergencia ante los incendios.
“Le
diría esto al Primer Ministro hoy: la nación quiere que abra las chequeras,
ayude a las personas a reconstruir sus vidas”. Eran las palabras del Ministro
de Transporte local, Andrew Constance.
“¡Mucha
gente ha perdido sus hogares. Necesitamos más ayuda!”, le gritaban al primer
ministro, quien poco después tuvo que caminar con paso apresurado a su auto al
ver el descontento arder, literalmente hablando.
Cuando
Morrison subió a su automóvil, una mujer se volvió hacia la cámara para decir
que el pueblo había sido “olvidado”.
“Esto
no es justo, estamos totalmente olvidados aquí abajo: cada vez que esta área
tiene una inundación o un incendio, no obtenemos nada”, reclamó.
Es
una emergencia que tiene a Australia sufriendo directa o indirectamente las
consecuencias de los incendios forestales. Las pérdidas humanas, animales y
materiales han dejado ver la magnitud de una catástrofe.
La
postal que acaparó los medios fue la de una mujer joven que se negó a estrechar
la mano del primer ministro a su llegada a Cobargo, una de las zonas más
castigadas por la emergencia.
0 comments :
Publicar un comentario
Por favor, ingresa tu correo electrónico para poder contactarte posteriormente... Gracias por visitarnos.