REPORTE ESPECIAL (www.libertadguerrero.net).- Hay muchos cuentos de camino sobre el sexo en la mañana y los encuentros sexuales nocturnos; pero los sexólogos aclaran que dependerá de la persona, sus preferencias, gustos y hasta del humor para que el organismo responda sexualmente a horas específicas del día.
Escoger el momento para la acción dependerá del cansancio o los niveles de estrés al cual esté condicionada la pareja.
El amanecer tiene varios puntos a su favor. “No es que sea mejor en la mañana”, dice la sexóloga Brigitt Baena, pero afirma que tiene muchos beneficios por considerar que es la hora en la que “el hombre está en su pico máximo de testosterona”. Eso produce, según explica, las erecciones espontáneas con las que suelen despertar los hombres y permiten que tenga una gran resistencia y energía para durar muchísimo más en la cama.
No obstante, sostiene que cualquier hora es buena: “Lo importante es no estar apurado ni cansado y estar dispuesto a pasarla bien”.
“Si la pareja se levanta descansadita y tienen un encuentro íntimo satisfactorio, eso es como hacer ejercicios porque libera endorfinas y activa el metabolismo. Seguramente va a rendir mucho durante el día”, dijo.
Hay una serie de factores que también influyen, como la edad: los que están iniciándose sexualmente ven en cualquier momento la posibilidad de intimar; para los jóvenes que no tienen parejas estables, los jueves, viernes y sábados por la noche son la oportunidad perfecta de conseguir una aventura en la cama; y en las parejas estables, el nivel de deseo en ambos va a marcar el ritmo.
La variante de la noche es el cansancio acumulado durante el día. Sin embargo, ese es el horario más común para las actividades sexuales. Las parejas que tienen hijos caen en la monotonía de estar juntos en la noche luego de que los niños duermen. Muchos son vencidos por el cansancio y van prolongando la frecuencia sexual. Los hombres son más propensos a sentir deseo mientras la pareja duerme y tal vez siempre quieran interrumpir el sueño para buscar pelea.
Después de comer, los niveles de deseo son muy altos, por lo que se considera como una buena oportunidad de intimar. En los días de lluvia, las personas tienden a querer estar “empiernados”, por lo que se consideran días muy activos.
Fuente: Agencias
Noviembre/30/2013
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