CONTEXTO POLÍTICO
Por Efraín Flores Iglesias
Mientras el gobernador Ángel Aguirre Rivero grita a los cuatro vientos de que la inseguridad en la entidad va a la baja, la realidad es otra. Los recientes hechos de violencia en los municipios de Teloloapan, Apaxtla de Castrejón y Cuetzala del Progreso indican que el crimen organizado es el que manda en las regiones de Tierra Caliente y Norte.
Los alcaldes son amenazados constantemente para dejar trabajar a los delincuentes, y los policías municipales son obligados a renunciar, porque de lo contrario son levantados y asesinados.
Los que parecen valerles un comino de que ya no haya tranquilidad en los pueblos, son los legisladores del PRD, quienes prefieren seguirle la corriente a su jefazo Ángel Aguirre de que en Guerrero no se vive una situación crítica por la inseguridad.
Ángel Aguirre podrá decir misa, lo cierto es que la sociedad está indefensa. Las extorsiones y secuestros siguen incrementándose. En varias localidades no hay presencia policiaca para proteger a la población de las garras de la delincuencia.
La muerte ronda por todos lados, pero eso no le importa al gobernador ni a su equipo de seguridad, ya que pretenden ocultar la verdadera realidad de las cosas.
De hecho, los alcaldes de los municipios arriba citados pretenden solicitar licencia a sus cargos, en virtud de que no han recibido la solidaridad y el apoyo gubernamental del gobierno estatal.
Ignacio de Jesús Valladares Salgado, Efraín Peña Damasio y Feliciano Álvarez Mecino están en estos momentos en el ojo del huracán; y ya no aguantan tanta presión de los integrantes de Los Caballeros Templarios, La Familia Michoacana ni de Los Guerreros Unidos, que a cualquier costo quieren tener el control absoluto de Tierra Caliente y el Norte de la entidad.
Con discursos no se combate la violencia. Se requiere de acciones concretas y de una buena coordinación con el gobierno federal. Eso lo debe de entender muy bien el gobernador y sus secretarios de Gobierno, de Seguridad Pública y el encargado de la Procuraduría General de Justicia.
EL CACHORRO DE TLANICUILULCO Y EL DISTRITO 24
El cachorro de Tlanicuilulco (Bernardo Ortega Jiménez) no le importa para nada los problemas sociales de Tixtla. Durante las primeras semanas de enero, precisamente cuando surgieron los grupos de autodefensa en las localidades de Atliaca y Acatempa, ni siquiera se acercó para atender el grave problema de inseguridad ni para escuchar las serias acusaciones en contra del alcalde perredista Gustavo Alcaraz Abarca, quien desde que llegó a la presidencia municipal no ha hecho más que otorgarle el poder absoluto a su vástago Gustavo Alcaraz Guerrero.
Y no solo Tixtla está olvidado por el presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, sino también los municipios de Quechultenango, Mochitlán, Mártir de Cuilapan (Apango) y Zitlala, que padecen serios problemas de agua y obra pública, pero eso sí, el señor legislador lo único que le importa es impulsar a varios de sus amigos y amigas para ser candidatos a las alcaldías de ese distrito, así como a la diputación local, ya que se siente el gran poderoso.
Si los electores le dieron una segunda oportunidad de representar el distrito 24 (antes distrito 02), fue porque en la LVIII legislatura trabajó intensamente para gestionar importantes obras en la administración estatal que encabezó Zeferino Torreblanca Galindo.
En lugar de actuar de manera más humilde luego de ser designado coordinador parlamentario de la fracción del PRD en la LX legislatura y por ende presidente de la Comisión de Gobierno del Congreso local, el hijo de Celso Ortega Rosas, se volvió soberbio. El poder lo mareó inmediatamente y lo peor de todo que no es él quien manda verdaderamente en el parlamento guerrerense, sino el nefasto dirigente de la tribu Nueva Izquierda, Sebastián de la Rosa Peláez.
Todavía está a tiempo para no ser repudiado severamente por el pueblo. Porque hay que recordar que de Violeta Campos Astudillo y Rubén Valenzo Cantor sólo se acuerdan de ellos por su prepotencia y por el abandono en que tuvieron a sus electores y a la población en general.
Bernardo Ortega está en el mejor momento de reconquistar a sus electores y velar realmente por ellos. Por eso es necesario que vuelva a aterrizar con el pueblo. El poder no es para siempre, eso queda muy claro.
ENTRE OTRAS COSAS… La que debe olvidarse del glamour que tuvo en el Distrito Federal con medios nacionales e internacionales, es la directora de Comunicación Social del gobierno del estado, María Fernanda Lasso Martínez, ya que el escenario en Guerrero es totalmente diferente. Conflictos aquí, conflictos allá.
Uno de los primeros pasos que debe dar primeramente, es empezar por ella misma para desterrar las actitudes prepotentes, soberbias y abusivas que prevalecen en esa oficina tan importante que ahora dirige, y que hasta el momento no le ha rendido resultados positivos al gobierno.
Que no olvide la experiencia de su antecesor, quien no le interesó para nada tender una buena relación con los representantes de los medios de comunicación locales, a pesar de que siempre manifestó que es parte de ese gremio.
Comentarios:
efrain_flores_iglesias@hotmail.com
Los comentarios y artículos de opinión son responsabilidad exclusiva de quien los firma. Libertad Guerrero Noticias los publica en respeto irrestricto a la libertad de expresión.
___________________________________________________
0 comments :
Publicar un comentario
Por favor, ingresa tu correo electrónico para poder contactarte posteriormente... Gracias por visitarnos.