ACAPULCO (www.libertadguerrero.net).- La directora de la escuela primaria Juan R. Escudero, ubicada en el poblado de los Órganos, Susana Rubio García, dijo que durante 32 años de servicio no había ocurrido un incidente como éste y, desde ahora, los festejos con motivos del Día del Niño, la Madre, el Padre y del Maestro se suspenderán.
Recordó que el viernes se programó la fiesta de celebración por el Día del Niño en la escuela primaria, donde tiene una matrícula de 410 alumnos.
El comité de padres de familia y maestros se organizaron para comprar la comida y celebrarse a sus pequeños, pero no esperaba que el alimento les hiciera daño.
"La comida la compramos con la misma persona que compra la carne donde siempre lo hace, la señora que hizo el mixote (barbacoa de res), es la que siempre hace la carne para los eventos grandes en la escuela y la que hace el espagueti es la que siempre lo hace la comida para los niños, y todo lo hicieron personas que siempre hacen comida para la escuela.
"Hicimos nuestra fiesta, fue un éxito, los niños estaban contentos, los maestros y muchos padres y la asociación de padres de familia se anexaron a la celebración, se dio barbacoa, espagueti, salsa, pastel y de tomar se compraron unos juguitos y todo estaba bien...la verdad ya no volveremos hacer festejos, los suspenderemos".
Comentó que la tarde -noche del viernes, una madre de familia le marco vía telefónica para decirle que su hijo estaba muy mal, pero también otros pequeños más, por lo que de inmediato se trasladaron al centro de salud de los Órganos para que fueran atendidos.
Explicó la directora que de inmediato se comunicó al pueblo y al realizar un sondeo vía telefónica, las madres de familia le manifestaron que eran varios niños que estaban muy enfermos.
"Primero comenzamos con 30 niños en el centro de salud de los Órganos y después vimos que no se daba abasto y acudimos con el doctor Peralta, pero vimos que no se daba abasto porque le estaban llegando más niños y acudimos al hospital general Donato G. Alarcón, donde ya estaban llegando más niños".
La directora, quien se encuentra preocupada por lo ocurrido, comentó que a través de un megáfono se recorrió el pueblo de Órganos para avisarles a las madres de familia que si sus niños presentaban problemas de fiebre, dolor de cabeza, dolor abdominal y diarrea acudieran de inmediato al centro de salud o al hospital Donato G. Alarcón o clínicas privadas.
Comentó que algunos padres de familia, maestros y niños comieron espagueti, pastel y barbacoa, pero no están enfermos.
BRANDO, EL NIÑO QUE PRESENTO TEMPERATURA HASTA DE 39 GRADOS
Brando Said, quien va en quinto año de primaria, es uno de los niños que presentó temperatura hasta de 39 y 40 grados por los problemas de intoxicación tras comer los alimentos que le ofrecieron durante el festejo del Día del Niño.
Norma, la tía de Brandon, comentó que desde la tarde del sábado ingresó al hospital Donato G Alarcón con fuerte dolor de estomago, cabeza, vómito y temperatura hasta de 39 grados, que sólo se la pudieron bajar con la aplicación de fuerte dosis de antibióticos y fomento de agua fría.
Brando, quien aún está hospitalizado, dice que se siente débil y su tía le ayuda a hidratarse con vida suero oral; tiene que utilizar un pañal desechable y le canalizan un suero para que se recupere pronto.
El menor tiene un hermano de nombre Kevin, quien cursa el tercer año de primaria y también fue hospitalizado por los mismos síntomas.
En el área de estancia para pacientes foráneos se tuvo que habilitar con equipo médico y camas para que enfermeras y doctores pudieran atender a más niños que desde la tarde del viernes, sábado y este día llegaron con fuertes síntomas de intoxicación.
En el centro de salud de los Órganos, Karen, una niña de 7 años, era también atendida por los médicos porque traía temperatura, vómito, diarrea y dolor de cabeza.
Karen dice que en su escuela le dieron barbacoa de res, espagueti, jugo y pastel, pero sólo se comió la carne y el pastel, y durante la noche del sábado se empezó a sentir mal.
Al centro de salud de esa localizad aún seguían llegando madres de familia con sus hijos de 6 y hasta 9 años de edad con problemas de intoxicación.
Los médicos y enfermeras tuvieron que trabajar horas extras para atender a los menores que llegaban enfermos
Por: Adriana Casarrubias
Abril/29/2012
www.libertadguerrero.net
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