HOUSTON,
TEXAS (www.libertadguerrero.net).- La leyenda continua. La de un Chávez ganando
batallas con contundencia. Así fue el triunfo del Julio Chávez Jr. en lo que
fue su primer defensa como campeón absoluto de los pesos medios. El
estadounidense Peter Manfredo sólo le duro cinco asaltos, en combate realizado
en el Reliant Arena.
Chavez Jr (44-0-1, 31KO) encontró un pequeño
titube en su rival, que aprovechó para atarcarlo sin piedad hasta que el réferi
lo abrazó para declarar su nocaut en el quinto asalto, en el minuto y 52
segundos. Manfredo Jr. (37-7, 20K) sólo fue la estadística en su presentación
como monarca del Consejo Mundial de Boxeo. El legado Chávez continua su
historia.
“Estoy contento por esta pelea, buscamos el
nocaut y lo conseguimos.Al final de cuentas busque mi mejor pelea. Ahora hay
varias opciones de rival y no le tengo miedo a nadie. Gracias a todos por
venir, ¡Arriba México!”, dijo Julio César, arriba del ring.
En pleno round de estudio, Chávez Jr. trabajó
más el puño izquierdo. Cruzado y gancho. Con movimientos hacia atrás y
laterales, con lo que buscó encontrar el mejor ángulo para atacar al
italoestadounidense. Un accionar que levantó las primeras correcciones de su
entrenador Freddie Roach.
Desde muy temprano, Manfredo ya tuvo el ojo
izquierdo rosado, ante un recto certero del sinaloense. Los volados del
nacional, fueron su principal ataque en el segundo episodio, ante un rival que
batalló para encontrar un hueco en la defensa del campeón. Julito conectó
sólidos golpes al rostro de Peter, el cual atacó una y otra vez.
Para el tercer round, Manfredo encontró sus
primeros cueros a la humanidad del mexicano. Pero por cada embestida, recibía
una dotación de ataques combinados que continuaron mermando su físico. En tanto
que la gente hizo su propia pelea con sus evocaciones de “Chávez, Chávez”.
Manfredo recibió su gran rechifla al lanzar un jab tras haber sonado la
campana.
Manfredo encontró sus mejores golpes en el
siguiente episodio al impactar la cara de Chávez Jr. cuando este entró al boxeo
en corto, en lo que pareció una mala decisión. Con esa confianza aparente de
tomar el combate, el estadounidense salió decidido a atacar, sin saber lo que
le esperaba.
Por eso en el quinto asalto, Manfredo salió a
buscar los jabs contundentes, pese a que esto implicaba bajar la guardia. Justo
después de que parecía dejar mal parado a Chávez Jr. con un cruzado bien
conectado, el nacional sacó una ofensiva feroz que hizo temblar las piernas de
su rival. Ante este síntoma, se lanzó a sacar toda la energía con el uno y dos,
que pudo seguir así toda la noche, sino es porque el réferi detuvo el combate.
Fuente: El Universal
Noviembre/19/2011
Noviembre/19/2011
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