Nos han dado la tierra - Libertad Guerrero Noticias

Nos han dado la tierra

APUNTES DE UN VIEJO LÉPERO
Jeremías Marquines


Cuando Ángel Aguirre, nuevo gobernador de Guerrero, les dijo a sus aliados perredistas, convergentes y petistas que “gobernarían juntos”, no les aclaró que ese “gobernar juntos” era con sus hermanos,  primos, sobrinos, cuñados, concuños y amigos, y que ellos, los militantes partidistas, tendrían dos caminos: aceptar y colaborar con “la bonita familia” en el gobierno, o de plano irse, como le acaba de decir el gobernador, con un desproporcionado exceso de violencia verbal, al senador David Jiménez Rumbo, uno de sus principales promotores, y actual Secretario de Desarrollo Social.Ángel Aguirre llegó al gobierno de Guerrero en medio de la desconfianza. Una desconfianza que no se ha terminado. Durante la campaña electoral, fue acusado por su primo Manuel Añorve de traidor, fue acusado de no cumplir sus compromisos. Pese a todo, el PRD le dio un voto de confianza que ha comenzado a erosionar desde muy temprano, al imponer a familiares y amigos en los principales cargos de gobierno.
Apenas la semana pasada, el senador y actual secretario de salud, Lázaro Mazón Alonso había denunciado que el hermano del gobernador, Carlos Mateo Aguirre Rivero, buscaba imponer en la dirección de finanzas de esa dependencia a un amigo suyo. Luego se supo que en realidad también era amigo del secretario de Finanzas Jorge Salgado Leyva y que entre los dos intentaron imponérselo a Mazón. Al final, el senador con licencia logró rechazar la intentona mafiosa y se quedó en el cargo
Es cierto que Ángel Aguirre le otorgó la titularidad de algunas secretarías a militantes perredistas, petistas y convergentes. Con esa acción, hay quienes piensan que cumplió uno de sus compromisos de campaña, lo que no se dice es que sólo les dio el cargo, no el control de las secretarías. A los perredistas les hizo lo mismo que el gobierno les hizo a los campesinos de la novela El llano en llamas: nos han dado la tierra, decían, pero sin agua.
Es un hecho que Ángel Aguirre no gobierna solo. Con él gobiernan sus hermanos y los miembros de dos familias: los Salgado y los Valdez Vilchis que han copado todos los cargos de importancia en las distintas secretarías con recomendados. Un caso paradigmático de este reparto del poder, es el de Mateo Aguirre, hermano del gobernador, quien ocupa el cuestionado cargo de Coordinador General del Ejecutivo Estatal, un espacio que el ex gobernador Zeferino Torreblanca  le creó arbitrariamente a su asesor Humberto Sarmiento para controlar toda la estructura de gobierno.
En el caso de Jiménez Rumbo se supo que sólo le dejaron el cascarón de una secretaría porque le despojaron de todos los espacios de importancia. Primero, Aguirre creó arbitrariamente un ente separado de la Sedesol encargado del manejo de los programas sociales como las pensiones, los uniformes y los apoyos a madres solteras llamado Guerrero Cumple; allí él nombró a la titular. Esta es una unidad de atención creada sin sustento legal pues no medió decreto de por medio, e independiente de la Secretaría de Desarrollo Social.
Luego, por medio de Humberto Salgado, le impuso todos los subsecretarios, directores, coordinadores y hasta les mandó a delegados para las distintas regiones, espacios que no existen. Para la dirección del parque Papagayo, el secretario de Gobierno Humberto Salgado, le envío a un sobrino de un cuñado de Aguirre, en el Instituto Guerrerense para la Atención Integral de las Personas Adultas Mayores (Igatipam), le enviaron a Alejandro Arcos Catalán, un seudo empresario al que algunos vinculan con Víctor Aguirre. En el museo interactivo La Avispa, con sede en Chilpancingo, Aguirre nombró a su encargado de relaciones públicas cuando estuvo en el senado, Érick Humberto Armenta Adame y así por el estilo.
El Grupo Guerrero, organización política que representa el senador David Jiménez, le envío a Ángel Aguirre una carta privada la semana pasada para solicitarle una reunión con el fin de aclarar el asunto de los nombramientos en Sedesol, no hubo en la carta ninguna amenaza, ninguna presión. La respuesta de Aguirre fue visceral y pública. De acuerdo a la nota publicada en algunos diarios, el gobernador  “sostuvo que la invitación a colaborar en su gabinete fue ‘individual’, no para incluir corrientes políticas, o a 20, 30 o 40 seguidores políticos de un secretario”.
La respuesta, en sí misma, es ofensiva no sólo para el senador Jiménez Rumbo sino para todos los perredistas que conforman Grupo Guerrero, una de las corrientes más fuertes del PRD-Guerrero, aliada a Alternativa Democrática Nacional. Al Grupo Guerrero pertenece el presidente estatal del PRD y el vicecoordinador de la bancada perredista en el Congreso local, además de varios presidentes, ex presidentes municipales y diputados locales.
Aguirre está equivocando el rumbo. Al responder de esta manera, abre una fisura no sólo con David Jiménez, sino que es una grieta en el PRD que se agigantará conforme pase el tiempo. Olvida que el chiste de un gobierno no estriba en cómo comiences sino en cómo terminas. La molestia por la imposición de familiares y amigos del gobernador en los cargos públicos, no es sólo de Rumbo o de Lázaro Mazón, hay otros secretarios o secretarias que están en la misma situación pero no tienen ni la dignidad suficiente, ni los tamaños para denunciar. Sienten que con ocupar un cargo ya resolvieron los hoyos negros del universo, se olvidan que no están ahí solo por ser sexies, sino que llegaron con el apoyo de muchos grupos y corrientes que trabajaron por ese proyecto y que es de gente de buena cuna saber retribuir.
En contraparte, habrá los estúpidos de siempre que intenten justificar los actos inmorales y abusivos de un gobernante, siempre los hay, así los hubo cuando se le criticó a Zeferino todos sus excesos pero al final se impuso la razón. Hay, los facilotes que saldrán a decir que Aguirre no puede ser rehén de ningún grupo, sólo de sus hermanos y de los Salgado y los Valdés Vilchis. Ahí están los que ven con buenos ojos la falta de transparencia y rendición de cuentas del nuevo gobierno. No hay diputado que exhorte al gobernador a cumplir desde el inicio con estas obligaciones y a ciudanizar este aspecto del gobierno.
El nombrar a amigos y familiares en los cargos públicos tiene una consecuencia inmediata. Es una acción que lesiona el derecho de los ciudadanos pues se alienta la impunidad y la corrupción. ¿Con qué calidad moral le habrá de exigir cuentas el gobernador a sus hermanos, primos y cuñados cuando cometan los abusos que habrán de cometer? El de Aguirre es un gobierno predecible porque las viejas mañas no se quitan.
El nuevo gobernador de Guerrero debe abandonar el recurso de la dilación y la mentira. No basta con negar la realidad como lo hizo su secretario de Gobierno al afirmar que no intentaron imponerle funcionarios a Lázaro Mazón. El recurso de mentir ha dejado muchas graves secuelas en Guerrero como cuando se trató de ocultar con mentiras la matanza de Aguas Blancas. Un gobierno alcanza autoridad moral y política cuando reconoce sus equivocaciones y corrige. Esa es la diferencia entre un gobierno de gran altura y otro destinado a la basura de la historia como el de Zeferino, al que ninguna de sus grandes obras públicas, sociales o administrativas lo salvó de la condena popular. Lo mejor para Guerrero y para el nuevo gobierno es el entendimiento, el diálogo. Serenarse en esta temporada de  Semana Santa y revisar y corregir las malas acciones cometidas. Amén.

Edición: Fracalo

Libertad Guerrero Noticias, periódico online editado desde el puerto de Acapulco, Guerrero, México, bajo la dirección del periodista Francisco Cárdenas López (Fracalo). Contacto: fracalo2001@yahoo.com.mx

0 comments :

Publicar un comentario

Por favor, ingresa tu correo electrónico para poder contactarte posteriormente... Gracias por visitarnos.